Ya no existe nada…
La oscuridad te
enseña sus garras,
Donde las uñas te las
clava
Lentamente te atrapa.
Es una gran dama,
enlutada.
En su pecho, un velo
lleva clavado,
Cubierto de dolor
Dejándolo herido.
Sale a pasear por las
noches, lentamente, lánguida.
En cada paso que da
Se le escapa una lágrima,
Lagrimas negras de
soledad,
Lagrimas amargas.
Secándolas con un
pañuelo
Se las guarda en una
caja,
Así va paseando el
tiempo
Esa gran dama
enlutada.
Extendiendo sus velos
negros
Hasta rayar el alba,
Donde regresa
lentamente,
Para cambiar su bata,
Y comenzar el día
Disfrazando su cara.
Como varia, como
cambia,
De noche bien
vestida,
De día disfrazada,
transformada
Qué gran dama...
A veces, hablando
Es inquieta, otras es
pausada,
Otras veces es
tempestad,
Otras solo calma,
Así es ella, tiene
mil caras...
En el día, es dama
pasajera,
En la noche, saca sus
armas,
Disfrazándose de
negro
Esa gran dama,
Tiene nombre, pero no
dice nada
Solo con su belleza
te atrapa.
La soledad, es la que
viene, enlutada…
ALOHE
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